Florentino Ameghino y la Teoría del Autoctonismo
A fines del siglo XIX el paleontólogo argentino Florentino Ameghino, estudiando las formaciones geológicas pampeanas del sur de la provincia de Buenos Aires, creyó descubrir restos humanos muy antiguos y de rasgos muy primitivos, asociados a fauna de mamíferos extinguidos, en terrenos del Cuaternario temprano y aún, del Terciario tardío. También descubrió una industria lítica (armas de piedra) primitiva a la que asignó gran antigüedad. En consecuencia, consideró que estaba en presencia de humanos muy primitivos de una notable antigüedad, que corresponderían a los eslabones perdidos enunciados por Charles Darwin, entre los simios y el hombre. De aquí desprendió también la conclusión de que el hombre americano no sólo era originario de este continente, sino que el origen de toda la humanidad debía ubicarse y buscarse en las pampas meridionales de América del Sur, desde donde se habría expandido hacia el resto del planeta.
En 1880 publica su obra “El origen del Hombre en el Río de La Plata”. En dicha obra y en otros escritos, comunicaciones y polémicas científicas, postuló y defendió apasionadamente sus teorías sobre el autoctonismo del hombre americano y su origen pampeano. Estableció un posible árbol genealógico para éste, el que terminaba en el Homo Pampeanus, pasando por el Diprotomo, el Tripotomo y llegando hasta el Tetraprotomo Platensis. Toda esta genealogía fue reconstituida a partir de unos pocos hallazgos de restos óseos, aparentemente de fósiles humanoides, entre los que se destacan una calota y un fémur.- Los terrenos pampeanos donde fueron descubiertos los restos, pertenecían al Cuaternario tardío, y no al Terciario.
- La calota estuvo mal medida y, ante nuevas mediciones, quedó establecida que pertenecía a un Homo Sapiens moderno.
- El fémur no era humano, sino que pertenecía a un pequeño felino.
- La fauna asociada al período que defendía Ameghino, correspondía a períodos posteriores a la última Glaciación.
Aunque Ameghino se defendió hasta su muerte (1911), éstas ideas perdieron realmente su base objetiva donde se sustentaban. Algunos de sus partidarios en Argentina, continuaron, hasta mediados del siglo XX, apoyando su teoría, pese a que quedó descartada por la ciencia moderna desde 1910.
Alex Hrdlicka y la Teoría Asiática
En 1908, el antropólogo Álex Hrdlicka planteó que los primeros pobladores de América fueron los cazadores paleomongoloides asiáticos que ingresaron navegando en balsas por el estrecho de Bering a finales de la glaciación de Winsconsin (10000 a.C. aproximadamente). Hoy se sabe que no fue navegando, sino caminando por el Istmo de Beringia, un faja de tierra que quedó descubierta por el descenso del nivel del mar a finales del periodo Pleistoceno. Los inmigrantes asiáticos habrían ingresado por el valle de Yucónde Alaska, para después avanzar por el resto del continente.
Esta teoría se apoya en las semejanzas antroposomáticas entre el hombre asiático y los amerindios: cabellos lacios y oscuros, ojos con pliegue mongólico, pómulos anchos y salientes, dientes en forma de pala, rareza no pilosa en la cara, la "mancha lumbar" en los bebés.Hrdlicka era partidario del origen monoracial del poblamiento de América. Según él, entre los indios de América (mayas, quechuas o patagones) hay un conjunto de caracteres comunes que sugieren un origen común general. Este“aire de familia” se debería a que todos descienden de un tronco común: el asiático mongoloide.
Es importante recalcar que Hrdlicka era firme partidario de un poblamiento reciente, para él las primeras bandas llegaron recién hacia el 10000 a.C., al finalizar la última glaciación (Wisconsin) del periodo Pleistoceno. Si bien es cierto, la teoría asiática es ampliamente aceptada por la comunidad científica internacional, Hrdlicka tuvo y tiene detractores. El punto más atacado es su tesis monoracial. Pese a esto esta tesis Asiática es considerada en la actualidad la teoría que goza de mayor credibilidad en la comunidad científica, debido a la profusa cantidad de pruebas y evidencias que la sustentan.Paúl Rivet y la Teoría Oceánica
Su planteamiento fundamental es descartar la homogeneidad racial de la que habla Hrdlicka, sin negar el aporte asiático en el poblamiento Americano. Paul Rivet, propuso una Teoría Oceánica, de origen múltiple del hombre americano, según la cual la población americana se llevó a cabo por cuatro oleadas migratorias denominadas de acuerdo a sus lugares de procedencia: mongoloide, australianos, melanesio-malayo-polinesio y esquimales.
Las oleadas estuvieron separadas por distintos espacios de tiempo, aportando caracteres asiáticos, australianos y melanesio-polinesios. Elaboró su teoría con múltiples evidencias como: rasgos biofísicos (estatura, color de piel, etc.), datos culturales y datos lingüísticos, tanto de los asiáticos, como de los americanos y polinesios con el objetivo de encontrar correspondencias que le permitieran reconstruir las posibles rutas migratorias que habrían seguido los primeros hombres americanos. Sus críticos sostienen que fueron insuficientes los datos arqueológicos considerados.- Mongoloide: Los primeros en ingresar a América serían los asiáticos, a través del Estrecho de Bering; separados en el tiempo, los diversos grupos aportarían elementos pre-mongólicos y mongólicos propiamente dichos, evolucionando física y culturalmente en forma diferente.
- Australianos: En segundo lugar, hicieron su arribo los elementos australianos, demostrado, según Rivet, por grandes similitudes físicas entre los cráneos de los patagones y de los australianos, del predominio del grupo sanguíneo 0 en ambos grupos y del común uso de producciones culturales como la cerámica, los mantos de pieles animales, las chozas circulares de ramas, el uso de troncos ahuecados como canoas, parecidas ceremonias religiosas, etc. Pero es en el aspecto lingüístico donde Rivet pone mayor énfasis, demostrando que existen analogías entre las lenguas patagónico-fueguinas y las australianas, mencionando vocablos similares para los mismos objetos. Las latitudes de Australia y la Patagonia difieren notablemente y por lo tanto, la inmigración australiana no pudo arribar directamente, sino que debió hacerlo por el norte o por el sur. Por el norte es poco probable, puesto que no hay huellas de su paso más allá del sur argentino, por lo que sólo resta la vía del sur, es decir la región magallánica. A esta conclusión arribó el portugués Mendes Correia, formulando la hipótesis de que los australianos llegaron a América sorteando el camino antártico.
- Melanesio-Malayo-Polinesio: La tercera oleada que arribó a América, según Rivet, aportó el elemento melanesio-malayo-polinesio, extendido en el Nuevo Mundo y que presenta mayores analogías antropológicas, culturales y lingüísticas. Vale mencionar el tipo dolicocéfalo, común a algunos grupos indígenas americanos y melanesios; el predominio del grupo sanguíneo 0; el uso de armas comunes como el atlatl o propulsor, cerbatanas, mazos, arcos y hondas; la utilización de morteros de madera, redes, mosquiteros; la ejecución de instrumentos musicales como la trompeta de concha, la flauta de caña, el tambor de madera y membrana de cuero; idénticas técnicas de navegación con piraguas dobles, balsas de cañas; la preparación de bebidas alcohólicas con semillas, el cultivo de tubérculos como la batata; la amputación de los dedos en señal de luto, etc. La posibilidad de contactos entre el mundo americano y el transpacífico se reforzaría con las piezas de cerámica halladas en Valdivia, Ecuador que tienen su similar en las elaboradas por la cultura Jomon (Japón). Además, las fuentes indígenas de Colombia, Ecuador y Perú hablan del arribo de extranjeros a sus costas. Incluso las crónicas incas mencionan la expedición del Inca Tupac Yupanqui a las islas occidentales que llevó al Tahuantinsuyo prisioneros de piel negra, oro y otros objetos que se conservaron en el Cuzco.Thor Heyerdahl, afirmaba la teoría que los polinesios eran originarios del Nuevo Mundo. Para probar su teoría, se enfrascó en un exitoso viaje de América a la Polinesia en una nave, la Kon-Tiki, construida con materiales propios de los pueblos prehispánicos. Sus conclusiones se basaban en las diferencias notables entre los pueblos polinesios y sus vecinos melanesios, micronésicos, malayos y mongoles, diferencias que eran insignificantes con respecto a los grupos amerindios. Con estos elementos concluyó que los polinesios, diferentes de sus vecinos y culturalmente más afines a los pueblos americanos, necesariamente debieron salir del Nuevo Continente.
- Esquimales: Penetrando por Beringia, representando la última oleada migratoria.